Esta excepcional residencia, ubicada en Santa Cruz, Guanacaste, se integra armoniosamente con su entorno natural, ofreciendo impresionantes vistas al mar y una exuberante vegetación tropical. Diseñada con un moderno estilo tropical, la casa se caracteriza por sus líneas limpias y materiales naturales, creando una atmósfera de serenidad y sofisticación desde su llegada.
La casa se caracteriza por un diseño abierto, donde los espacios interiores se integran armoniosamente con el exterior a través de ventanales de piso a techo y puertas corredizas que permiten la circulación de la brisa marina. Las amplias terrazas, que rodean casi toda la casa, sirven como extensiones naturales de las salas de estar, invitándole a disfrutar del clima cálido, las pintorescas puestas de sol y los sonidos constantes de la naturaleza.
Lo más destacado del área exterior es la piscina de borde infinito, que parece fundirse con el horizonte y el profundo azul del océano. Las vistas desde aquí son verdaderamente inigualables, ofreciendo una experiencia visual que cambia a lo largo del día con la luz del sol y las nubes.
Para potenciar la sensación de relajación y bienestar, la propiedad incluye un espacio de yoga al aire libre, estratégicamente ubicado para disfrutar de la privacidad y la conexión con el paisaje. Este santuario, conectado directamente con la residencia principal, está diseñado para la meditación, la respiración y la reconexión con la naturaleza, todo ello rodeado de vegetación y relajantes sonidos ambientales.
Cada detalle de esta casa ha sido elaborado para brindar comodidad, elegancia y un estilo de vida en perfecta sintonía con la belleza costera tropical de Costa Rica.